Ventajas de un ben sueño
Mientras estas dormido si bien no estas consciente, tu cerebro y tu cuerpo continúan funcionando de manera activa. El sueño es un mecanismo biológico, mediante el cual te ayuda al procesamiento de nuevos datos, por lo que una buena noche de sueño ejerce una influencia positiva en nuestro cuerpo.
¿Cuánto debemos dormir? El número de horas depende de diversos factores, pudiendo mencionar, la edad, tu salud, si duermes lo necesario y además tu estilo de vida. La norma general es que debemos dormir alrededor de 8 horas.
Beneficios de una buena noche de sueño
El primer gran beneficio, es lograr la reparación física. Cuando estamos en estado de sueño profundo, nuestro organismo inhibe todos sus sentidos. Disminuye nuestro ritmo cardiaco, así como la presión arterial y nuestra frecuencia respiratoria, además liberamos hormona del crecimiento.
La hormona del crecimiento tiene como una de sus funciones principales, regular el reparo del tejido dañado durante nuestra jornada diurna. Motivo por el cual, tras lograr una buena noche de sueño, nos recuperamos con mayor velocidad.
Para esas personas para las cuales la estética es importante otro de los beneficios de una buena noche de sueño es la disminución de las arrugas. La reparación celular no ocurre solo en el interior, sino que además nuestra piel se va renovando con mayor velocidad en la noche.
Ejerce también un efecto beneficioso sobre nuestro sistema cardiovascular. Está demostrado que para mantener una buena salud cardiovascular, hay que cumplir con 3 pilares fundamentales: Regular nuestro colesterol, ejercitarse durante el día y, obviamente, dormir bien.
Estudios revelan que la privación del sueño se correlaciona con el incremento de Proteína C Reactiva. La cual es una sustancia que se eleva cuando existen procesos de inflamación interna, que son el preludio para el desarrollo de problemas cardiovasculares.
Una buena noche de sueño nos ayuda a mantener nuestro buen humor. Cuando tenemos una mala noche de sueño, despertamos de mal humor.
Investigaciones realizadas explican que el dormir menos o en su defecto, una mala noche de sueño, tiene efectos negativos en nuestro funcionamiento neuronal, el cual rige nuestro comportamiento y humor.
Por otra parte, al mantener nuestro buen humor, ayuda a reducir la depresión. Al dormir nuestro cuerpo entra en fase de relajación. Esto, facilita la producción de serotonina además de melanina.
Dichas hormonas son las responsables de contrarrestar el efecto de la adrenalina y el cortisol, las cuales son responsables del estrés. Por lo que nos ayuda a ser más felices y mantenernos fuertes en lo emocional.
Por otra parte, una buena noche de sueño tiene un efecto positivo sobre la memoria, ayudando a mejorarla. Al dormir, fortalecemos la conexión entre nuestras neuronas.
Cuando atravesamos la fase REM, se repara el hipocampo, que es el lugar donde almacenamos nuestra memoria y se transforma la memoria de corto plazo a memoria de largo plazo.
Además, incrementa nuestra creatividad, ya que, al no estar cansado, nuestro cerebro y hormonas se mantienen balanceados. Nuestra memoria trabaja perfectamente, lo que potencia nuestra imaginación y creatividad.
Dormir bien disminuye el riesgo de sufrir de algunas enfermedades, como por ejemplo, el Alzheimer. Si tenemos una noche de sueño deficiente, aumenta nuestro riesgo de sufrir alguna forma de Alzheimer.
Una investigación reveló que esas personas que tenían menos horas de sueño o que padecían trastornos del sueño, expresaban biomarcadores que reflejan un mayor riesgo de padecer Alzheimer.
Por último, el dormir bien ayuda a que perfeccionemos habilidades. Un estudio realizado en Canadá reveló, que aquellas personas que dormían bien, demostraban mayor agilidad en tareas motoras complejas, por ejemplo, tocar algún instrumento.
